Tarjeta Alimentar: conocé el cronograma de acreditación en septiembre
En el marco del Plan Argentina Contra el Hambre, el Ministerio de Desarrollo Social de la Nación informa las fechas de acreditación para titulares de la tarjeta durante el mes de septiembre.
El Ministerio de Desarrollo Social de la Nación dio a conocer las fechas de acreditación para titulares de la Tarjeta Alimentar en el mes de septiembre. Bajo el marco del Plan Argentina contra el hambre, la tarjeta tiene como objetivo garantizar el derecho a la alimentación de las familias más vulnerables del país y promover el consumo de cercanía.
En septiembre, a quienes poseen la tarjeta en forma física el monto total mensual se les acreditará el tercer viernes del mes, en este caso el 18 de septiembre.
Por su parte, para quienes se les acredite a través de la Asignación Universal por Hijo (AUH), el calendario de pago será el siguiente:
- Documentos terminados en 0, 1, 2, 3, 4 y 5: Martes 15 de septiembre.
- Documentos terminados en 6: Miércoles 16 de septiembre.
- Documentos terminados en 7: Jueves 17 de septiembre.
- Documentos terminados en 8: Viernes 18 de septiembre.
- Documentos terminados en 9: Lunes 21 de septiembre.
La tarjeta Alimentar está destinada a madres y padres con hijos o hijas de hasta 6 años de edad que reciben la Asignación Universal por Hijo (AUH); embarazadas a partir de los tres meses que cobran la Asignación por Embarazo; y personas con discapacidad que reciben la AUH. Establece un monto de 4000 pesos para quienes tienen un hijo y de 6000 pesos para quienes tengan dos o más hijos y permite comprar todo tipo de alimentos.
Entre enero y agosto de este año, el gobierno nacional destinó una inversión social de 60.074 millones por medio de la Tarjeta Alimentar, que fueron utilizados mayormente para la compra de alimentos frescos en los 24 distritos del país. Con una inversión mensual de 7.700 millones de pesos, la tarjeta tiene un millón y medio de titulares.
El ministro Daniel Arroyo explica que “la Tarjeta Alimentar mueve la rueda de la economía de abajo hacia arriba: por un lado, mejora la calidad de la alimentación de las familias y garantiza derechos para la primera infancia; y por el otro, descentraliza las compras, moviliza el comercio y la producción local de los alimentos”.